En el último programa ‘Elche Proyecto Ciudad’ en colaboración con EsRadio Elche, Manuel Romero, nuestro presidente del Instituto Ciudad Idea de Elche (ICIE) viene a contar la problemática situación que sufrimos con los accesos para llegar a Elche, especialmente con la famosa rotonda del Aljub.
Una entrada difícil espanta al visitante
En el programa se comprara la ciudad como un negocio. Imaginemos un negocio con un producto excelente, pero con una entrada sucia y caótica. ¿Cuántos clientes volverían? Esa es exactamente la sensación que provoca entrar a Elche por accesos mal diseñados, que crean un cuello de botella. Tenemos una ciudad rica en cultura, historia y vida, pero si no facilitamos que la gente llegue de forma sencilla y agradable, además de tener aparcamiento a su disposición, simplemente no vendrán… o no volverán.
Manuel comenta que uno de los errores estructurales que arrastra la ciudad es que sus vías están mayoritariamente diseñadas para facilitar la salida de los residentes y no tanto la entrada de visitantes. Habla de carreteras desde la carretera de Dolores, la carretera de Alicante, por el norte…arterias principales y rotondas colapsadas que no acaban de acoger bien a los visitantes.
La rotonda del Aljub: un embudo sin solución… ¿o sí?
La famosa rotonda del Aljub se ha convertido en el símbolo de este problema. Su tamaño reducido limita su capacidad para absorber tráfico. Por más que se intente redirigir vehículos hacia ella, el atasco seguirá existiendo. La solución no es llevar más tráfico allí, sino precisamente quitarlo.
Desde ICIE proponemos una estrategia global que aproveche otras infraestructuras, como la rotonda del Corte Inglés, mucho más amplia, para descongestionar la zona. Se podría habilitar una vía de doble dirección que conecte esta rotonda directamente con la carretera de Crevillente, reduciendo así la dependencia del embudo que supone el Aljub.
Propuestas claras y viables pala aliviar el tráfico
No hacen falta grandes infraestructuras para empezar a mejorar. Aquí algunas medidas realistas y de aplicación inmediata:
Acceso sur desde Dolores: convertir el tramo hasta la Plaza de los Puntos en una vía de entrada directa al centro. Solo se necesitaría cambiar el sentido de algunas calles y mejorar la señalización. Actualmente, muchas señales inducen a error o hacen callejear al visitante innecesariamente.
Rotonda del Corte Inglés: aprovechar su capacidad para redistribuir tráfico que actualmente entra forzosamente por el Aljub. Con una conexión directa desde la EL20 hacia Crevillente, se podría desahogar todo el nudo viario.
Vías infrautilizadas: zonas como la calle paralela al centro comercial Aljub podrían reactivarse para canalizar tráfico y evitar embotellamientos. Son amplias, están poco usadas y podrían convertirse en salidas alternativas eficaces.
Señalización moderna: incorporar paneles con información en tiempo real sobre disponibilidad de parkings, rutas rápidas al centro y otras guías que ayuden especialmente a quienes no conocen la ciudad.


Un problema compartido, una solución compartida
El tráfico y la accesibilidad no solo dependen del Ayuntamiento. También entran en juego la Generalitat, el Ministerio de Transportes y, por supuesto, la colaboración ciudadana. Sin embargo, muchas de estas medidas pueden activarse con voluntad política y gestión local, sin esperar eternamente a grandes obras estatales que nunca llegan.
Desde ICIE esperamos realmente que se gestione un cambio real con la rotonda del Aljub, para conseguir una ciudad más conectada con sus residentes y sus visitantes.
Puedes escuchar el programa completo y todos los demás en Ivoox.